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DNA Racing

Kit de elevación y cambio de marchas para pedal de acelerador Toyota GR Yaris - DNA Racing

Kit de elevación y cambio de marchas para pedal de acelerador Toyota GR Yaris - DNA Racing

SKU:PC1852

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Código: PC1852

Este kit totalmente plug&play eleva el pedal del acelerador 17 mm y lo desplaza 20 mm hacia la izquierda. El objetivo de esta modificación es poder utilizar las técnicas de "doble embrague" y "punta y talón" de forma rápida y sencilla.

VENTAJAS:

  1. La distancia reducida entre el acelerador y el freno permite movimientos más cortos y por tanto más rápidos entre el acelerador y el freno.
  2. En cambios rápidos de marcha, hemos detectado algunos atascos en la caja de serie, que generan "desplazamientos" y/o "rayaduras", sobre todo entre segunda y tercera marcha. Todo ello puede generar desgastes bruscos de los sincronizadores, averías en la caja de cambios y, en el peor de los casos, "sobrerrevoluciones" no deseadas que no son buenas para la distribución.
    En conducción deportiva, En aceleración, se suele recurrir a la técnica del doble embrague para solucionar estos problemas (Toyota, consciente de este problema, ha incorporado un sistema electrónico que permite activar el doble embrague automático). Esta ayuda electrónica permite limitar estos problemas, pero la gestión manual puede ser, si se hace bien, mucho más eficaz y precisa.
    En la desaceleración , por el contrario, se utiliza la técnica “punta y talón”, esto permite una mejor sincronización de los cambios, ayudando a los sincronizadores de la transmisión a obtener cambios descendentes más rápidos, precisos y libres de rayaduras y atascos.
  3. El “ talón y punta ” es, en esencia, una técnica de conducción que combina la frenada con la reducción de marchas. Se suele utilizar antes de entrar en una curva para maximizar la velocidad manteniendo la dinámica del coche a niveles de seguridad mucho más elevados. El objetivo de esta técnica es hacer que el régimen del motor coincida de forma uniforme con el de las ruedas. Cuando se suelta el pedal del embrague, el motor actúa como freno y, antes de que la transmisión empiece a girar el motor, éste corre el riesgo de frenar tanto las ruedas motrices que puede minar el agarre del neumático y, en cualquier caso, crea una transferencia de carga del vehículo capaz de desestabilizarlo.
    En el caso de tracción delantera, la transferencia de carga puede ser tan intensa como para aligerar el eje trasero hasta anular el agarre de los neumáticos, con el resultado de poner al vehículo en derrape y hacerlo girar sobre sí mismo o, en el caso de agarre limitado, hacer que las ruedas delanteras pierdan tracción y la trayectoria resultante sea el subviraje.
    Por otro lado, un vehículo con tracción trasera siempre sobrevirará, pero incluso en este caso será difícil de controlar.
    Un vehículo con tracción total, como es el caso del YARIS, hará una mezcla de ambos, en función de la distribución de tracción y agarre de cada neumático.

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